Por este motivo, se recomienda consumir alimentos calóricos. Las calorías y lípidos de los que disponemos son el “comburente” que emplea nuestro cuerpo, pues ante estos sacrificios, el cuerpo precisa de sobra oxígeno, la frecuencia cardiaca incrementa y se gasta mucho más energía. Este gasto de energía genera un aumento del calor corporal y con esto, la sudoración. Si el problema de la sudoración solo te pasa por la noche, tal vez debas reflexionar sobre qué hay en tu cama. Las colchas y sábanas pesadas confeccionadas en tejidos como el poliéster o la viscosa pueden lograr que te sientas en un horno. No te sorprendas si amaneces con la ropa de cama empapada.
Cuando pensamos en sudor acostumbra venirnos a la mente el calor profundo del verano, sin embargo, aunque logre pasar mucho más desapercibido, también generamos sudor en invierno. El sudor es un desarrollo natural y necesario de nuestro cuerpo, ya que su función primordial es la de regular la temperatura corporal y refrescar el cuerpo en el momento en que esta aumenta. En ocasiones, la sudoración nocturna puede ser un síntoma de una enfermedad llamada hiperhidrosis. Esta enfermedad afecta a las glándulas sudoríparas que segregan agua y puedes llegar a completar cubos de sudor aun sin tener calor. Si piensas que sufres hiperhidrosis, consulta a tu médico. Para evitar los sudores nocturnos y el calor en cama en verano, la gama Termo-reguladora Velfont regula la temperatura corporal mientras duermes para hacer un microclima incesante a lo largo de toda la noche.
Sudores Nocturnos En Hombres
Para comprender por qué sudas tanto en el momento en que duermes, asimismo tienes que tener en cuenta que la nutrición influye de manera directa en la sudoración nocturna. Por ejemplo, el consumo de alcohol puede producir sudoración en el momento de dormir y complicar el descanso. De igual forma, el picante causa sudoración nocturna, en tanto que su digestión es mucho más lenta y pesada, lo que implica un incremento de la temperatura de la piel. La hiperdrosis nocturna es el fenómeno que experimentan aquellas personas que sufren de una sudoración excesiva mientras que duermen. La sensación de irritación que genera es singularmente molesta si, además de esto, compartes el lecho con otra persona.
Sin embargo, si la sudoración provoca que te desveles, consúltalo con tu médico. “Los antidepresivos o los fármacos contra la hipertensión adjuntado con otros tienen la posibilidad de ser la razón po la que te despiertas sobre incómodos charcos de sudor”, enseña el doctor. “Esto pasa pues estas medicinas acostumbran a perjudicar a la parte del cerebro que regula las glándulas sudoríparas y la temperatura interna corporal”. En un caso así, consultarlo con tu médico de cabecera para que te recete otro tipo de medicamentos.
Atención Comercial
Algunos de ellos, como comentamos anteriormente son naturales y no tienen por qué razón ser preocupantes. Sin embargo en algunos casos, y mucho más si van acompañados de síntomas como fiebre, escalofríos, pérdida de peso o sofocos puede ser rastro de algún inconveniente o enfermedad. La sudoración nocturna aparece en el momento en que se padece una hipoglucemia, esto es, cuando el nivel de azúcar en sangre es demasiado bajo. Más de 70 % de las mujeres perimenopáusicas dicen tener sudores nocturnos. Los sofocos, que duran entre tres y seis minutos y que por la noche hace que se despierten con sensación de calor profundo, sudando y con el pulso acelerado. Asimismo es normal sufrirlos en el embarazo y es síntoma del síndrome premenstrual.
También puedes darte una ducha refrescante antes de acostarte. Frente a una infección, se eleva la temperatura corporal y parece la sudoración nocturna. Tuberculosis, brucelosis, VIH, endocarditis, osteomielitis y, ahora, también covid-19 por la variante ómicron del SARS-CoV-2. En su caso, la hipoglucemia se da cuando los índices están bajo los 70mg/dL.
Los famosos sofocos que tantas mujeres sufren en esta etapa se identifican por provocar una sensación de calor que va de la cabeza y el pecho al resto del cuerpo. Comunmente, van acompañados de palpitaciones y una sudoración profunda que es en especial intensa en las cuatro primeras horas de sueño. Este exceso de sudor acostumbra manifestarse en las palmas de las manos, las plantas de los pies y las axilas, si bien en varias personas la profusa sudoración en todo el cuerpo. En el momento en que hace frío, nuestro cuerpo metabolismo se acelera, esto es, gasta mayor proporción de energía para poder mantener el calor.
Lo creas o no, algunas de las medicinas más frecuentes sin receta médica producen efectos secundarios inopinados como la sudoración nocturna. Te tienen la posibilidad de quitar el dolor de cabeza o muscular, pero asimismo hacen descender la temperatura a la que se activan tus glándulas sudoríparas. Esto provoca una sudoración excesiva, incluso cuando semeja que no lleve a cabo tanto calor. Si bien el sudor es frecuentemente un mecanismo del organismo humano designado a regular la temperatura corporal, no es menos cierto que las emociones, como sucede con el miedo, tienen la posibilidad de estimular su secreción. De ahí que en periodos de superiores niveles de agobio emocional o de ansiedad la producción de sudor pueda verse incrementada de forma destacable.
Temperaturas Bajas Y Exposición A Focos De Calor
Esto se debe a que, durante la gestación, el nivel hormonal incrementa ocasionando la temperatura del cuerpo asimismo se incremente. Si además de sudores por las noches se muestran los ronquidos, el cefalea y te pasas el día fatigado es posible que debas tratar la apnea del sueño antes de que derive en otras dolencias. Por este motivo detrás de la hiperhidrosis probablemente halla infecciones, menopausia o síndrome premenstrual, diabetes, cáncer, apnea del sueño o empleo de medicamentos que causan una sudoración fuera de lo normal.